Diez locales clandestinos en Calama han sido cerrados durante el transcurso de este año, según informó el delegado presidencial provincial de El Loa, Miguel Ballesteros. La mayoría de estos cierres se llevaron a cabo debido a denuncias de la comunidad local, que se quejaba de ruidos molestos y actividades relacionadas con la venta y el consumo de alcohol sin los permisos adecuados.
En dos de los casos, los propietarios de estos locales clandestinos violaron los sellos de clausura para reabrir sus negocios, lo que resultó en su detención. El delegado presidencial señaló que están trabajando activamente para garantizar el cumplimiento de las normativas vigentes y que cuentan con personal dedicado a la fiscalización de estos establecimientos.
Miguel Ballesteros expresó su agradecimiento a los ciudadanos que han denunciado la operación de estos locales ilegales y destacó la labor de Carabineros en la fiscalización y el cumplimiento de las normativas. Además, hizo un llamado a la comunidad a continuar denunciando cualquier actividad ilegal relacionada con la venta de alcohol.
El cierre de estos locales clandestinos busca mantener el orden y la seguridad en la comunidad, y el delegado presidencial enfatizó la importancia de regular adecuadamente este tipo de establecimientos para garantizar la tranquilidad de la población.
