Acuerdo Por la Paz Social y la Nueva Constitución
El Congreso de Chile ha llegado a un acuerdo para reformar la constitución del país en un esfuerzo por restaurar la paz después de semanas de protestas violentas que han provocado la muerte de al menos 20 personas.
La nueva constitución buscará una "salida pacífica y democrática a la crisis", anunció el presidente del Senado chileno, Jaime Quintana, en una conferencia de prensa en Santiago el viernes por la mañana.
Quintana dijo que el nuevo código "construiría un verdadero contrato social" y sería "100% democrático" en comparación con la constitución actual, que fue aprobada en 1980 durante el gobierno del dictador militar Augusto Pinochet.
"Esto ha sido posible gracias a los ciudadanos que han sido movilizados", agregó.
Los manifestantes suben a la cima de un monumento en la Plaza Italia, Santiago, durante una protesta contra el presidente chileno, Sebastián Piñera, el 14 de noviembre de 2019.Las manifestaciones a gran escala continuaron en Santiago el jueves, esta vez para conmemorar un año desde que un joven indígena fue asesinado a tiros por la policía.
Camilo Catrillanca, un activista de 24 años, fue asesinado por un disparo en la cabeza durante una operación policial en la región central de la Araucanía el año pasado.
La policía niega que haya sido asesinado, diciendo que recibió un disparo accidental mientras apuntaban a ladrones enmascarados.El presidente chileno, Sebastián Piñera, ya había prometido reformas sociales y económicas para abordar los problemas centrales de los recientes disturbios , incluidos aumentos de pensiones, seguro médico asequible, reducción del precio de los medicamentos y estabilización de los precios de la electricidad.
El mes pasado anunció una cancelación de los aumentos de los precios de la energía que habrían afectado a "casi 7 millones de hogares chilenos", pero muchos manifestantes continuaron participando en sus cientos de miles, viendo las reformas como demasiado poco y demasiado tarde. Muchos han exigido la renuncia de Piñera.
Términos del acuerdo
Finalmente, y tras días de negociaciones, la propuesta que se dio a conocer establece un plebiscito de entrada -defendido desde el inicio por la oposición- con dos preguntas. En la primera, el votante se debe pronunciar sobre si apoya o no un cambio constitucional. La segunda propone dos mecanismos para la elaboración de la Carta Magna: una convención constituyente compuesta en un 100% por ciudadanos elegidos para esa labor y -la otra-, una convención mixta con porcentaje de participación de parlamentarios (50%) y 50% de miembros electos para ese fin. Ninguna de las dos alternativas llevaría el nombre de “asamblea”.
El acuerdo incluye también que el plebiscito se fije para abril del próximo año y que cualquier acuerdo al que llegue la instancia que se creará requerirá el apoyo de 2/3 de sus miembros para su aprobación.
La elección de los constituyentes se efectuará en octubre del próximo año, junto con los comicios de gobernadores regionales y alcaldes. El plazo de funcionamiento de la instancia será de 9 meses, prorrogable una sola vez por otros tres meses.
El texto constitucional que redacte la convención tendrá que servisado por medio de un “plebiscito ratificatorio” que se llevará a cabo con voto obligatorio. La votación se realizará “60 días después” de entregada la propuesta de la nueva Carta Magna. Sin embargo, el acuerdo establece que “en ningún caso este podrá realizarse 60 días antes ni después de una votación popular”.
Los partidos visaron también que parlamentarios puedan postular para integrar la convención, pero con el requisito de que deben cesar en el cargo para competir. Este último era uno de los puntos que venían en la propuesta de la oposición. Asimismo, los constituyentes tendrán una inhabilidad de un año para postular a cargos públicos luego de que se termine su labor.
