Docenas de criadores de perros de Corea del Sur se enfrentaron con la policía el jueves pasado en protesta contra la presión gubernamental para prohibir el consumo de carne de perro. Este mes, funcionarios gubernamentales y del partido gobernante acordaron presentar una ley antes de fin de año que pondrá fin a esta práctica centenaria. Aunque legisladores individuales ya habían propuesto proyectos de ley similares, esta será la primera vez que el gobierno respalde la medida.
Cerca de 200 dueños de granjas caninas, propietarios de restaurantes y otros involucrados en la industria participaron en la protesta, coreando consignas, alzando los puños y pronunciando discursos críticos. Un manifestante llegó incluso a amenazar con suicidarse si el gobierno y el partido gobernante avanzan con el plan.
A pesar de la presencia de algunos granjeros que llevaron perros enjaulados en sus camiones, se les impidió trasladarlos al lugar de la protesta. Se generaron tensiones con la policía, provocando una pelea a empujones entre manifestantes y agentes. Al acercarse un camión, aparentemente transportando perros, algunos granjeros corrieron hacia la calle.
Los granjeros informaron que la policía arrestó a tres manifestantes, aunque las autoridades aún no han confirmado las detenciones. En Corea del Sur, el consumo de carne de perro no está expresamente prohibido ni legalizado, pero el gobierno y el partido gobernante buscan eliminar gradualmente la industria para 2027, en respuesta a preocupaciones internacionales y crecientes demandas de derechos de los animales. La ley propuesta ha generado un intenso debate en la sociedad surcoreana y ha recibido el respaldo de celebridades mundiales, incluyendo a Kim Basinger y Brigitte Bardot.
