El amor es una parte integral de nuestra vida. Hace que nuestra vida sea colorida, nos hace creer en nosotros mismos, nos hace vivir. Es el mes de febrero, el mes del amor. Entonces, es el momento perfecto para estrenar películas románticas en esta época del año.
Te guste el romanticismo o no, a veces vale la pena darse la oportunidad de ver como el amor triunfa o no en la pantalla grande, por eso te damos esta breve reseña sobre “a través de mi ventana” un top line de la plataforma Netflix:
""Alerta spoilers""
Basada en la novela del mismo nombre, la película gira en torno a Raquel, una joven adulta que está obsesionada con su apuesto vecino de clase alta, Ares. Ares es hijo de un multimillonario, que es uno de los magnates más grandes del país, mientras que Raquel tiene una educación sencilla de clase trabajadora. Está tan obsesionada con Ares que recopila todo tipo de información sobre él, recopila cada foto de él y también escribe sobre sus sueños a su alrededor en su diario. Pronto, esta obsesión se convierte en algo más, ya que ambos se ven envueltos en una relación complicada, que se atormenta y se preocupa el uno por el otro.
La nueva generación del exploitation juvenil para el streaming tiene un caramelo que huele a éxito generacional en todo el mundo. Valdrá tanto como placer culpable para comentar en el instituto como celebración extasiada de los miles de seguidores de los libros originales. Para el resto, que seremos los que escribiremos sobre ella en medios más o menos especializados, es posible que se recuerde -si se recuerda- como un producto más cercano a la vergüenza ajena que al goce, que llegaría poniendo distancia y mucho humor. O amor.
Cine moderno para adolescentes
Un bagaje estético e interpretativo que, pese a las durísimas líneas de diálogo que tienen que defender la mayoría del tiempo, se nota en el espesor de la película y el tono de los diferentes papeles.
Es una fantasía erótico-romántica juvenil, un gran parque de atracciones de menos de dos horas para una adolescente. Los referentes más inmediatos para entenderse: la torturada historia de amor con malote sensible de A tres metros sobre el cielo con un poco de la ilusión romántica y de cuento teen de la saga After. Todo barnizado con todo tipo de sueños y calentones sexuales con los que diferenciarse de las otras dos.