La comunidad de Tarapacá se ha visto conmocionada por el trágico desenlace de la desaparición de Reinaldo Pacheco Salazar, quien fue reportado como desaparecido por su familia el pasado 24 de agosto en la región. Las autoridades han revelado que un amigo cercano de Reinaldo, quien había estado cooperando con la policía como testigo, confesó ser el principal sospechoso de su asesinato.
Según informes de la Policía de Investigaciones, el cuerpo de Reinaldo Pacheco Salazar fue encontrado enterrado cerca de la Ruta 5 Norte, en la comuna de Pozo Almonte. El amigo del joven, que había estado colaborando con las autoridades, cambió su estatus de testigo a imputado después de confesar su participación en el crimen.
El subprefecto Cristián Sayago, jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI Iquique, señaló que la desaparición de Pacheco inicialmente se trató como una denuncia de presunta desgracia. Sin embargo, a medida que avanzaba la investigación, surgieron sospechas de la participación de terceras personas en su desaparición. La información obtenida condujo a la identificación del presunto responsable y al lugar exacto donde había sido abandonado el cuerpo.
El fiscal Oscar Sáez explicó que la investigación incluyó la revisión de grabaciones de cámaras de seguridad y registros de datos telefónicos que contradecían la versión proporcionada por el acusado. Finalmente, el imputado reconoció su implicación en el homicidio de Reinaldo Pacheco Salazar.
Se ha revelado que tanto la víctima como el sospechoso eran amigos y compartían una historia anterior. Si bien el sospechoso no tenía antecedentes penales, Reinaldo Pacheco Salazar enfrentaba acusaciones previas relacionadas con la recepción de vehículos robados y el uso de vehículos con matrículas falsas.
El sospechoso, de alrededor de 30 años y de nacionalidad chilena, será formalmente acusado de homicidio calificado, así como de posesión de arma de fuego y municiones. El arma de fuego involucrada en el caso fue encontrada en la posesión del sospechoso y, según su testimonio, pertenecía a la víctima.