Una hazaña única en el mercado automotriz
En un evento que ha capturado la atención de entusiastas de los autos eléctricos y de lujo, un empresario chileno ha logrado lo que parecía imposible: convertirse en el orgulloso propietario de un Cybertruck, el revolucionario vehículo eléctrico de Tesla. La hazaña no solo lo posiciona como uno de los primeros en América Latina en obtener este icónico modelo, sino que también refleja su capacidad para superar las complejidades de importar directamente un vehículo de este tipo desde Estados Unidos.
Así lo consiguió
Todo comenzó en 2021, cuando durante un viaje a Estados Unidos, Albo —como se le conoce— vio por primera vez un Cybertruck en circulación. La experiencia fue suficiente para despertar en él una obsesión: adquirir este vehículo que promete revolucionar la industria automotriz con su diseño futurista y sus innovadoras prestaciones.
Decidido a cumplir su sueño, Albo utilizó su experiencia como empresario para trazar un plan que incluyó la gestión de trámites de importación, contactos con intermediarios en Estados Unidos y el cumplimiento de las normativas chilenas para homologar un vehículo de estas características.
La experiencia como clave del éxito
El empresario no es ajeno a los desafíos. Con años de experiencia en la importación y comercialización de bienes, supo anticiparse a los obstáculos legales y logísticos que implicaba traer un Cybertruck a Chile. Entre las barreras más significativas estuvo la homologación del vehículo, un proceso que exige adaptar el automóvil a las regulaciones locales de seguridad vial y emisiones, aunque este último punto fue menos problemático gracias a que el Cybertruck es 100% eléctrico.
“Fue un proceso largo, pero cada paso valió la pena. El vehículo no solo es una joya de diseño, sino también una máquina sostenible que refleja hacia dónde debemos movernos como sociedad”, comentó Albo durante una entrevista.
¿Qué hace al Cybertruck tan especial?
El Cybertruck, presentado por Tesla en 2019, destaca por su diseño angular, que lo hace parecer salido de una película de ciencia ficción. Fabricado con acero inoxidable ultrarresistente y equipado con vidrio blindado, el vehículo promete una durabilidad sin precedentes. Además, su rendimiento es otro factor que lo posiciona como un modelo deseado: alcanza de 0 a 100 km/h en menos de 3 segundos, cuenta con una autonomía de hasta 800 kilómetros y puede cargar hasta 3,500 kg, siendo ideal tanto para actividades recreativas como para trabajos exigentes.
En Chile, el vehículo no solo llama la atención por sus características técnicas, sino también por lo que representa: un compromiso con el futuro de la movilidad eléctrica en una región que aún se encuentra en transición hacia alternativas más sostenibles.
¿Un nuevo mercado en Chile?
La llegada del Cybertruck podría ser un indicador de que el mercado chileno está listo para acoger vehículos eléctricos más innovadores. Aunque el costo de estos autos aún es prohibitivo para la mayoría, la creciente oferta de estaciones de carga y los incentivos gubernamentales están haciendo que la movilidad eléctrica sea más accesible.
“Espero que este sea el primero de muchos. Mi objetivo es que más chilenos se entusiasmen por los autos eléctricos, no solo por su estética y rendimiento, sino por el impacto positivo que tienen en el medio ambiente”, concluyó Albo.
Este logro no solo posiciona a Albo como un pionero, sino que también abre el debate sobre el futuro de la electromovilidad en América Latina, un futuro que parece estar cada vez más cerca.
