Aunque se haya anunciado un cese, las marchas continúan.
Pese a que el Comité Nacional del Paro, CNP, tomó la decisión de suspender y replantear la estrategia con la que se estaba llevando acabo la marcha, las personas siguen saliendo a las calles sin acatar lo que aparentemente se habría manifestado de forma oficial el pasado martes.
"Hemos decidido hacer una interrupción temporal de las movilizaciones recurrentes que veníamos haciendo los miércoles", dijo en una rueda de prensa el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Francisco Maltés.
Las manifestaciones que sacaron en las primeras semanas desde el 28 de abril a decenas de miles de personas a las calles contra la extinta reforma tributaria en primera instancia y luego por un sinfín de reclamos sociales y políticos, siguen siendo convocadas y estando presentes en la mayoría de las ciudades principales en Colombia.
Esto pareciera un descontento entre los manifestantes y el CNP, como en muchas ocasiones los estudiantes lo han planteado y como al unísono se pudo propagar durante las caminatas de este miércoles: “no nos representan, el Comité del Paro solo da vergüenza”.
Debido a esto, el miércoles 16 de junio se presentaron acompañamientos por parte de las autoridades en Bogotá, mientras que en Medellín fue necesaria la presencia del Esmad y se registraron varios heridos en la camina en donde se encontraban aproximadamente más de 300 personas que se dirigían hacia el occidente por la Avenida San Juan.
Por su parte, los jóvenes siguen convocando manifestaciones afirmando que el Comité no ha prestado atención a sus peticiones en temáticas laborales, de educación, salud, entre muchas otras.
Los sindicatos que lideran el CNP prometieron un repliegue y ya anunciaron futuras citas como un "gran concierto" el próximo domingo 20 de junio y una movilización hacia el Congreso el 20 de julio, día en que se instala el nuevo periodo de sesiones legislativas. Esto se hará debido a que se cumple un año de que el pliego de emergencia de peticiones haya llegado a las manos del Gobierno.
